martes, 19 de marzo de 2019

19 de marzo: Día de San José, Patrono Universal de la Iglesia Católica





Hoy 19 de marzo se celebra el día de San José, padre de Jesús, esposo de la Virgen María y Patrono Universal de la Iglesia Católica. 

Su culto está ampliamente difundido en el mundo cristiano, sin embargo, no siempre fue así. Los cristianos de la Antigüedad solían rendir culto sólo a los mártires, y este no era el caso de José.

Fue a principios del siglo IV cuando comenzó a aparecer el culto a su figura por parte de los Coptos, que eran egipcios de fe cristiana, aunque ellos celebraban el día de San José el 20 de julio de su calendario.

Gracias a los Carmelitas su culto se extendió hasta Europa, y se consolidó cada vez más tras su aparición en el calendario Dominico.

San José fue introducido en el calendario romano un 19 de marzo, durante el pontificado de Sixto IV. Posteriormente, el papa Pío IX lo nombró Patrono Universal de la Iglesia Católica, convirtiendo su día en Solemnidad y una importante fecha.

También es considerado patrono de las familias, los padres, las mujeres embarazadas, la buena muerte, los viajeros, los inmigrantes, ingenieros, artesanos y trabajadores.

San José es quien tuvo el privilegio de ser esposo de María, de criar al Hijo de Dios y de ser la cabeza de la Sagrada Familia. Es patrono de la Iglesia Universal, de una infinidad de comunidades religiosas y de la buena muerte.

"José, hijo de David, no temas recibir a María, tu esposa, pues lo que en ella ha sido concebido es obra del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados" (Mt. 1, 20-21), le dijo el ángel en sueños al “justo” San José.

San José es conocido como el “Santo del silencio” porque no se conoce palabra pronunciada por él, pero sí sus obras, su fe y amor que influenciaron en Jesús y en su santo matrimonio.

Cuenta la tradición que doce jóvenes pretendían casarse con María y que cada uno llevaba un bastón de madera muy seca en la mano. De pronto, cuando la Virgen debía escoger entre todos ellos, el bastón de José milagrosamente floreció. Por eso se le pinta con un bastón florecido.

Junto a María, San José también tuvo que sufrir que no los quisieran recibir en Belén, que el amor de su vida diera a la luz en un establo y el tener que huir a Egipto, como si fueran delincuentes, para que Herodes no mate al niño. Pero supo afrontar todo esto confiando en la Providencia de Dios.

Con su oficio de carpintero no pudo comprar los mejores regalos para su hijo Jesús o que recibiera la mejor educación, pero el tiempo que le dedicó para atenderlo y enseñarle su profesión fueron más que suficiente para que el Señor conociera el cariño de un papá, que también es capaz de dejarlo todo por ir en busca del hijo extraviado.

Se conoce a San José como Patrono de la buena muerte porque tuvo la dicha de morir acompañado y consolado de Jesús y María. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario