A la ciudad cuna de mi padre
Mi romántico, añejo y dulce Saltillo...
Mi ciudad adoptiva, casi mi tierra madre
con clima de paraíso y con aroma a membrillo
En tus calles caminé
siguiendo el sendero de tus arroyuelos,
en tus aulas me eduqué
siguiendo el ejemplo de tus herederos
y hacia el cielo me encamino
buscando la grandeza
emulando la nobleza de la sierra Zapalinamé.
Tierra de escuelas y leyendas,
De esfuerzo y de esperanza
Conocida como de México la Atenas
Fuente de virtud y de templanza.
A ti dedico mis recuerdos:
En tu Alameda guardo mi infancia,
Una niñez sin igual
Con golosinas y sus globos
Envueltos en la elegancia
Del uniforme de gala
De mi escuela Anexa a la Normal.
Ciudad nacionalista que inculca
El amor a nuestra Patria
Que no propició nunca
La traición ni la falacia.
Al contrario, de Saltillo muy cerca,
Fue donde nació la democracia
Como no rememorar a mi Ateneo
Mi glorioso Ateneo Fuente!!!!
Alma Mater de grandes guerreros
Y de nuestro Constituyente.
Centenaria Institución
semillera de Ingenieros,
Arquitectos y Abogados
que han sido agradecidos
y han pagado cien veces
a su ciudad Saltillo
el haber sido elegidos
del equipo de “Daneses”.
De ese “equipo sin igual”
Que luchan y se esfuerzan
Y siempre quieren ganar
De esos hombres y mujeres
que han escrito con oro
a través de sus haberes
obras de gran decoro
que dan en la historia brillo
de mi elegante y sobrio Saltillo.
Seguro estoy que Coahuila
Seguirá creciendo y avanzando
Mientras a Saltillo arriben almas
Que quieran seguir estudiando.
Mientras los sarapes se extiendan
Y muestren su faz multicolor
Y las regiones de Coahuila se entiendan
Alrededor de un salón
Será Saltillo la fuente
De alegría y de pasión
Fungiendo como Maestra
Y cuna de la educación
Proveyendo convivencia
Y muchas veces amor.
Amores de estudiantes
Inocentes e intensos,
Que cambian cualquier semblante
Con sus siempre tiernos besos.
Caminando por tus calles
Cada vez que vuelvo a tí
Mil recuerdos pinto yo
De lo que en esta ciudad viví
Y en cada edificio veo
La dicha que Dios me dio
De crecer desde ser niño
En Saltillo, mi viejo Saltillo
La ciudad por la que siento
Un incomparable cariño.
(Desconozco su autor)